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sábado, 23 de marzo de 2019



Nuestras motocicletas

Supongo que todos hemos tenido una mala experiencia en los talleres de reparación de motocicletas, mi anécdota es la siguiente: llevé a servicio mi primera moto comprada de agencia al taller autorizado, feliz puesto que yo creía que la tratarían con esmero y dedicación, es su marca y la deben cuidar para que los clientes den buenas referencias del servicio, al salir del lugar considerando que habían realizado todos los trabajos que ellos "decían realizar"  les pagué y me fui pensando que esto es lo que siempre debo hacer con el vehículo; cuidarlo llevarlo al taller autorizado para no tener problemas.

Debo comentar en este momento que cuando la compré el vendedor me mostró la moto de punta a punta. Ahora continúo, después del primer mes la moto empezó a dar problemas con el tablero, se apagaba de forma intermitente y decidí revisar la moto superficialmente, al quitar la tapa donde va la batería me doy cuenta que quitaron la batería nueva y colocaron una batería vieja por las características físicas que esta tenía, lo primero que hice fue llamar a la agencia para que me dijera que había pasado, no quiero hacer tan largo como fue este asunto, pero nadie pudo hacer nada para resolver el problema que había  suscitado con la moto. Para mí esto fue el colmo.

Después de este problema mi deseo fue aprender a reparar la motocicleta por mis propios medios, resulta que el deseo y el interés lo tenía, pero no tenía el conocimiento técnico, fue así que me di a la tarea de buscar dónde podría estudiar mecánica de motocicletas. Fue un compañero de trabajo que me contó de una institución con varios años de experiencia en el área de la mecánica de motocicletas.

La institución me permitió aprender sobre los elementos técnicos que debía saber para poder trabajar en la motocicleta, con paciencia y dedicación se logró la meta deseada. En el transcurso del estudio realizado también conocí a personas que comparten la misma pasión y deseo por hacer un trabajo bien hecho.

Ahora que ya han pasado unos años desde que salimos del técnico me he reunido con uno de mis compañeros (Eduardo Hernández) y luego de diversas situaciones que nos ocurrieron hemos podido dar forma a nuestro sueño y con mucho gusto y orgullo les presentamos nuestro taller de motocicletas. 



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